Celia Sánchez Ramos

Celia Sánchez Ramos nos abre los ojos ante la realidad de la ciencia y la divulgación en la entrevista concedida a Belén García Hidalgo con motivo de su candidatura al Premio Príncipe de Asturias de Investigación Científica y Técnica. Desde este programa queremos desearle todo lo mejor para el próximo 25 de mayo, fecha en la que es hará público el fallo del jurado. Muchas gracias y mucha suerte Celia.

Por Belén García, redactora de ENTRE TÚ Y YO

"El Perfil"

Celia Sánchez Ramos

Investigadora y docente en la Universidad Complutense de Madrid pero, sobre todo, madre, se caracteriza por no perder nunca la sonrisa. Gran profesional y excelente persona, Celia Sánchez-Ramos no duda en acercarse a la comunidad universitaria para compartir con ella su saber y sus logros.

Son muchos los premios que ha recogido a lo largo de su carrera profesional y, en víspera de otro posible galardón, esta zaragozana infatigable no muestra atisbo de altanería sino todo lo contrario, es la humildad convertida en persona.

Sus grandes ojos negros son poseedores de ese encanto y coquetería con la que te envuelve su forma de ver y hacer ver a los demás que la ciencia es sólo una forma de ayudar a mejorar la vida de la sociedad. Su fuerte compromiso y su enorme humanidad desprenden un halo de alegría y serenidad a su alrededor encendiendo el motor de la curiosidad que le permite mantenerse viva, renovarse. Quizás por ello trabaja en equipo y se rodea de gente joven, de nuevos talentos con los que aprender y a los que enseñar.

Sus compañeros y amigos dicen de ella que es una fuente inagotable de energía, una mujer que nunca se detiene, que jamás se rinde. Mirar la vida desde una perspectiva diferente es seguramente su gran filosofía.

Es probable que el 25 de mayo sume un premio más a su carrera, a su vida… al convertirse en la primera investigadora española en recibir el Premio Príncipe de Asturias de Investigación Científica y Técnica. Haciéndolo un guiño a la suerte y deseándole lo mejor nos despedimos de ella con nuestros mejores deseos.